El puente que conecta el barrio de Más del Rosari La Coma con la Universitat de Valencia ha sido desprovisto de las vallas metálicas y paramentos que fueron instalados para evitar el paso mientras se verificaba que esta antigua infraestructuras puede soportar el peso de los vehículos y abrirse al público. Ante la inactividad de la administración local el puente ha sido desprovisto de estas barreras y actualmente viandantes, ciclistas o motocicletas pueden transitar por dicho puente cuya seguridad no ha sido acreditada.
El gobierno del Partido Popular aprobó en el mes de marzo la ejecución de las correspondientes pruebas de carga y estudios indispensables para proceder a su apertura, contratándolos por un importe de 21.000 euros. Sin embargo a finales del mes de junio una de las primeras decisiones del alcalde, Juan Antonio Sagredo, por Junta de Gobierno Local, fue la paralización de los estudios aduciendo un “problema de competencias” con la administración autonómica. Según argumentó entonces el propio alcalde, la Generalitat Valenciana daba los permisos para la actuación “siempre y cuando, el consistorio fuera el responsable de la conservación y explotación de la infraestructura”. Sagredo anunciaba a finales del mes de junio la celebración de una “reunión con carácter de urgencia con la Dirección General de Obras Públicas de la Entidad de Infraestructuras (EIGE) para abordar la apertura del puente sobre la carretera CV-31” y añadía que “superado este escollo, podrán reanudarse los trabajos sobre el puente”.
Transcurridos casi dos meses de la paralización de las obras desde el Grupo Municipal Popular exigimos al alcalde que se tome en serio este asunto. Nos consta que en fecha 28 de julio Juan Antonio Sagredo mantuvo una reunión con la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, de la que apenas trascendió que habían hablado sobre el proyecto Puerto Mediterráneo, pero no que se abordara una cuestión tan importante para los vecinos de Más del Rosari como es la apertura del puente. Recordamos que el Equipo de Gobierno del Partido Popular asumió el desarrollo de estas obras de modo subsidiario, ya que de acuerdo con los técnicos municipales consideramos que es la Universitat de Valencia a la que le correspondería llevarlo a cabo”. Este hecho supone que actualmente se esté dirimiendo en el juzgado a quien le corresponderá finalmente acarrear con dichos costes. A juicio del Partido Popular, consecuentemente con lo defendido cuando estábamos en el gobierno, corresponde a la Universitat de Valencia el abono de los costes de las pruebas necesarias para la apertura y por otro lado el alcalde de Paterna debe velar porque no se le imputen posteriormente a los paterneros unos costes de mantenimiento de esta infraestructura que no nos corresponden. Esperemos que Juan Antonio Sagredo mantenga esta postura de un modo firme y decidido, pero tenemos nuestras reservas dadas los constantes indecisiones y cambios de rumbo que están carcaterizando la gestión del alcalde de Paterna en estos meses.
