Inicio OPINIÓN Al Rincón de Pensar: A la España de los porcentajes

Al Rincón de Pensar: A la España de los porcentajes

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Los números que nos facilitan nuestros gobernantes, no pueden ser mejores- Además, los dan en porcentajes para que sean más asimilables por comparaciones con los tiempos. Así, el IBEX 35, sigue subiendo, (enhorabuena a los inversores), sube el PIB, baja la deuda , suben las recaudaciones, baja el paro, crecen las inversiones…El panorama no puede ser más idílico. Y tengo que decir, que todos estos números, son ciertos en términos reales.

Cosa distinta, es la repercusión que los mismos tienen en el españolito de a pie. El que está en el paro, el que ha sido contratado a tiempo parcial, el que ha agotado la subvención de desempleo y no tiene ninguna entrada de dinero en casa. Estos, que son la mayoría de los españoles, no siguen la evolución de la Bolsa, ni la del PIB ni los deuda externa, porque los comportamientos de estos parámetros no les influyen para nada.. Sus porcentajes, son otros: un parado es una persona con un porcentaje de paro del 100% -Viva Perogrullo-, y un trabajador a tiempo parcial es un empleado al que su trabajo sigue sin permitirle cambiar la lavadora, y a veces sin poder pagar la mensualidad de la hipoteca.

Los jubilados, conocen un solo porcentaje: el del 0,25% que le ha subido su pensión. Es decir, de una pensión de 800 euros, conoce – porque se lo han anunciado a bombo y platillo-, que este año, cobrará dos euros más que el anterior. Esta realidad, sería cómica  de no ser porque resulta trágica. No olvidemos que en la mayor parte de los casos su pensión mitiga a los malos tragos que pasan sus hijos y nietos.

Comenzamos la declaración de renta, y el Gobierno, no ha publicado el porcentaje de defraudadores que cada año, nos hacen pagar a los demás la parte alícuota que ellos no pagan. Ya sabíamos por una brillante abogada del Estado, que lo de que Hacienda somos todos es una milonga, una frase publicitaria que solo obliga a los de siempre. Si Hacienda también fuera su ex ministro Rato, su compañero Blesa, los Puyol, y unos miles de personas más, tal vez, hasta las pensiones podrían subir a nivel de lo que sube el IPC.

No voy a ser tan iluso, como para pedirle al gobierno que, ya que nos ofrece los porcentajes que –aunque sean retorcidamente ciertos-, les permiten sacar pecho, ofrecieran también aquellos que siguen afectando en la vida real a la mayoría social, que siempre habita en el pueblo llano. Nadie conoce, el porcentaje oficial, por ejemplo, de corrupción política.

Por eso, debemos condenar, y condenamos a los porcentajes que nos ofrece el gobierno, a la permanencia durante una semana en este rincón de pensar, donde excepcionalmente

nuestro Ministro Montoso, podrá aprovechar para preparar otra amnistía fiscal que limpie de culpas a los de siempre. No sea que alguien sufra un ataque de mala conciencia si no recibe la bendición tributaria del Sumo Sacerdote de la cosa.