Como en cada ocasión en la que se aproxima la soñada “paga doble” que reciben,-que recibimos- los pensionistas, los comentaristas políticos, se asoman a la pantalla de nuestra televisión o a la columna del periódico de turno, y anuncian sus dudas, de que las arcas del Estado, puedan hacer frente a la paga, porque no tienen recursos para aumentar el gasto social. Por cierto que la pensión de jubilación, no debiera figurar en la partida de gasto social. La pensión que cobramos los que hemos sido trabajadores –afortunadamente con larga vida laboral-, no es más que la devolución que se nos debe de las retenciones que se nos han estado haciendo, para ir devolviéndolas, cuando la jubilación nos deja sin el sueldo que nos correspondía por nuestro trabajo. Era un préstamo que mes a mes hacíamos a la Administración, con la condición, de que a su vencimiento, nos fuera devolviendo , con la trampa añadida, de que por cuestión de la misma edad que nos convierte en pensionistas, la esperanza del resto de tu vida es, por razones biológicas, cada vez más a corto plazo. Es lógico, que cada año que cumplimos nos indiquen que cada vez nos quedan menos que cumplir.
Y cuando se habla de la paga de jubilación, hay que pensar, en la inmensa cantidad de jubilados que la reciben, escasa, y con la obligación moral en muchos casos de tener que compartirla con los hijos y nietos que estando en edad de trabajar, no tienen ni trabajo ni prestación, que ya agotaron. Es decir, la labor social que cumplen los jubilados es inmensa y además le quitan al Estado la obligación de solucionar el problema a aquellos
que rozan la indigencia y comparten plato de lentejas con la paga del padre y del abuelo
Pero, luego, están los políticos que para aumentar la confusión, te presentan la cuadratura del círculo. Generalmente, esto lo hacen los políticos de la oposición. Por ejemplo, mientras todos cuestionan la sostenibilidad de la paga de jubilación, los avispados líderes, piden al gobierno la bajada de impuestos. Claro, esta propuesta tiene un profundo calado en el pueblo. Todos deseamos pagar menos impuestos. Pero lo que no podemos hacer al mismo tiempo es bajar impuestos en el momento en que se habla de la falta de recursos para hacer frente a las pagas de jubilación.. Y lo ideal, seria que ambas cosas fueran compatibles como son deseables. Solo tendrían que gestionar bien lo público, cortar de raíz la corrupción…,pero no parece que sea el camino que esten dispuestos a seguir.
La pensión de jubilación es necesaria e intocable, y debe estar garantizada de por vida. Sin que nadie nos meta el miedo en el cuerpo. Fuimos metiendo dinero en una hucha, para poder sacarlo cuando no tuviésemos el recurso del salario, porque la vida laboral,-y la otra-, tienen su fin.
De modo que, de forma colectiva, vamos a dejar en el Rincón de pensar, a los que juegan con la preocupación de los mayores, para que, durante una semana tengan tiempo de arrepentirse de jugar con las cosas de comer.
