La recogida selectiva de residuos es un servicio que en las últimas décadas se ha ido incorporando a la sociedad y que hoy se ve como algo natural en la mayoría de los hogares. Las administraciones públicas hacen importantes esfuerzos a la hora de fomentar la educación medioambiental para que en cada casa se separe la basura y se deposite en los contenedores correspondientes. Sin embargo a excepción de determinados bares y restaurantes que disponen de recogida de vidrio, esta práctica común en las zonas urbanas no ha llegado a los polígonos. Al menos no a Fuente del Jarro porque los empresarios no tienen la posibilidad de hacerlo ya que no tienen contenedores específicos para ello, salvo que se lo procuren ellos mismos. Cabe recordar que algunas empresas deben acreditar la recogida selectiva de residuos para el cumplimiento de sus normas de calidad pero deben hacerlo por sus propios medios sin apoyo de la administración.
Para Asivalco “las empresas pagan importantes sumas de dinero a través del IBI y también en la tasa para el tratamiento de la basura que se abona integrada en la factura del agua”. Sin embargo, “pese a pagar como cualquier otro contribuyente, determinados servicios no están contemplados, como es el caso de la recogida selectiva de residuos”.
Desde Fuente del Jarro consideramos que “de un tiempo a esta parte parece que la se ve a las áreas empresariales como unos espacios a los que se debe apoyar porque de ello depende buena parte de la prosperidad de las zonas en las que están ubicadas”. Para Asivalco, “la verdadera prueba de este cambio de tendencia será cuando tengamos, al menos, los mismos servicios y atenciones que en el resto de zonas del municipio”.