El Pacto del Batán, ¿es un matrimonio político con recorrido, que pueda durar hasta que el voto les separe?
El Pacto del Batán es una unión política. Hasta que los votos nos separen no, hasta que el proyecto nos separe. Como en toda unión, nos unimos porque tenemos los mismos objetivos y en esos mismos objetivos es donde hemos hecho ese pacto. Mientras tanto, se mantienen esos objetivos comunes y mientras se mantengas éstos, el Pacto del Batán se mantendrá. No es ningún sentido electoralista, es responsabilidad en cuanto a cumplir objetivos político y de cambio político y de cambio de realidad social de nuestro pueblo y para temas electorales los votos ya decidirán si continúa en el 2019 o si no en qué proporción.
¿Qué ha cambiado para que su partido en general, y usted en particular, hayan pasado de denostar GESPA durante tanto tiempo y sea usted hoy quién la preside?
No ha cambiado nada y tampoco han denostado. Ha denostado la manera de gestionar de la empresa pública, nosotros como Compromís votamos a favor de la creación de la empresa pública cuando estábamos en la oposición de Agustín y Compromís se creía esa herramienta de gestión pública, lo que han denostado siempre es la manera de gestionarla, el ocultismo a la hora de elegir algunos trabajos, la manera de desviar el control que tendría que tener GESPA por parte del Ayuntamiento y eso, como todos, somos conscientes de que la única forma de cambiarlo es desde dentro. Nos quedaría solo el derecho a la “pataleta”, pero esa responsabilidad de cambiar las cosas entendemos que entrando dentro es de la manera que se pueden cambiar. Yo de momento en este mes ya en la inclusión de cláusulas sociales y en hacer un proceso de selección de personal que ha sido público, todo el pueblo se ha podido enterar, todos han tenido la misma oportunidad a la hora de participar y todos han tenido los objetivos y los criterios publicados conforme toca, con todo esto yo creo que ya es una señal de que las cosas se van a hacer de manera diferente. No es denostar, es la gestión de la propia herramienta, la empresa es útil lo que pasa que hay que cambiar los principios de gestión y recuperar el sentimiento del servicio público que debería tener la empresa como un servicio público, no como un chiringuito.
¿Es más cómodo vivir en la oposición política, que compartir compromisos de gobierno, con aquellos a los que hicieron dura oposición?
No es cómoda ninguna de las dos cosas, depende de cómo se lo tome cada uno. Nosotros hemos demostrado que estando en una oposición, con gobiernos con una mayoría absolutista, que hemos sabido hacer una oposición constructiva y una oposición a nivel contundente, a nivel de fiscalización y de poner las peras al cuarto a grupos super potentes cuando nosotros todavía teníamos dos regidores contra catorce y tampoco es cómodo. Todo depende de cómo te lo tomes, porque nosotros prácticamente hacíamos las mismas horas y dedicábamos el mismo tiempo que ahora. Es un tema diferente, porque obviamente ahora tienes la responsabilidad y todo eso que pedías pues ahora debes hacerlo y cuando finalizas el programa pues ya tienes la capacidad de gestionarlo y ordenarlo para que las cosas se vayan haciendo. O sea que tampoco es cuestión de comodidad, es cuestión de cambiar el chip y de directamente ponerte a hacer las cosas y a gestionar, en vez de pedirlas o exigirlas. Entonces esa capacidad es lo bonito para los que nos gusta la política, es decir, de tener esas herramientas para poder cambiar las cosas.
¿Tienen solución, y van a darla, para que el inmenso potencial laboral, que aportan a Paterna sus polígonos industriales, revierta en creación de empleo?
En la medida de lo posible tenemos esa capacidad y ya se están empezando a poner las herramientas para poder poner en marcha esa maquinaria. Nosotros siempre hemos criticado esa desconexión que había entre polígonos, empresarios, comerciantes en el Ayuntamiento que anteriormente pues estaba dedicado más a buscar otros inversiones que no a potenciar lo que realmente teníamos y ese viraje en la propuesta de presupuestos que hemos hecho ahora desde el Pacto del Batán pues ya se apunta en una propuesta del comercio local como motor de ocupación para una puesta en la mejora de los polígonos industriales como motor de ocupación y para conseguir que nuestros polígonos, los que hace no muchos años eran un motor de ocupación, no solo del pueblo sino de toda la comarca o prácticamente de la provincia de Valencia, pues continúen siendo lo que eran. Eso pasa por mejorar el entorno, los accesos, como ahora que se ha conseguido hace la alegación para tener un acceso directo de la V-30 a la segunda fase del polígono industrial, pasa por formar a la gente para que se crean que Paterna tiene capital humano como para nutrir nuestras empresas y que las empresas tengan esa responsabilidad social de contratar a gente del pueblo, que está igualmente formada y a la gente que no está formada pues también apostar por las personas y que se formes y puedan tener una oportunidad dentro de las empresas del municipio. Es conjugar las dos cosas, tanto invitar a las empresas a que contraten a gente del pueblo como invitar a nuestros parados para que se forme y puedan acceder a esos puestos del mercado laboral.
Contemplemos Europa desde Paterna: ¿ Qué hace la izquierda, o mejor, que no hace, para que la extrema derecha, esté tomando un auge tan preocupante , a la otra parte de los Pirineos?
Yo creo que lo que no se tiene es un proyecto real de sociedad, de lo que es una sociedad de izquierdas basada en la justicia, en la solidaridad… y eso es lo que no se está haciendo y en estos países puede ser que se esté perdiendo la credibilidad y es el riesgo que estamos corriendo aquí en España de que la gente de la izquierda está más preocupada de pegarse entre ellos que de hacer frente a la derecha y eso pues favorece a que esos extremos aparezcan. Tener claro cuál es el modelo de sociedad que queremos, que yo creo que eso es lo que le pasa a una parte de la izquierda que no tiene claro qué modelo de sociedad tiene que defender hace que se produzcan esos virajes porque la gente no encuentra una alternativa en un partido que siempre ha puesto en defensa esa justicia social, esa solidaridad internacional también, como en el caso de los refugiados. Por lo tanto, esa falta de respuesta alimenta otros discursos del odio, del odio al diferente, del egoísmo de ver al inmigrante como una agresión y esa es lo que echamos en falta y quizás por ese motivo el Pacto del Batán ha sido importante en Paterna, porque esas izquierdas que en algún punto estamos muy en desacuerdo proponemos los puntos que tenemos que común para tirar hacia delante con nuestros matices y conseguir que esos discursos de extrema derecha no prosperen y vean que hay otras formas de hacer las cosas, de incluir a la gente, de hablar de temas de integración, crear servicios públicos para todos para evitar ese tipo de discriminación.
CERRADO EL COMEDOR SOCIAL ¿QUE VENTAJAS OFRECE LA TARJETA SOLIDARIA frente a este espacio?
La tarjeta solidaria, entre otras cosas, es un modelo de servicios sociales que consiste en “dar la caña en vez del pez”, si hasta ahora teníamos muchos recursos y a la gente se le estaba dando el pez creando una dependencia de la administración y una dependencia de esos recursos brutal, unos recursos que a muchos estigmatizaban o no dignificaban, porque también eran muchos los que rechazaban el hecho de recurrir a esos recursos y lo que se buscan son otros proyectos que dignifiquen y que apuestan por la autonomía de las personas y la independencia. La tarjeta solidaria normaliza en esos hábitos de que la gente sin ningún tipo de señal o de estigma pueda ir a un supermercado convencional a comprar sus productos con la libertad de elegir cada día lo que quiere comer o lo que comen sus hijos, es decir, no están sujetos a un menú que pone una persona porque ese día toca pescado y todos tienen que comer pescado o no y también pues tienes otro tipo de recursos que no son exclusivamente alimentos, como por ejemplo de higiene personal, pañales u otras cosas para los niños y con esto normalizas los hábitos de que la gente pueda ir a comprar a un supermercado la comida que necesita. Esta tarjeta ya existía en Paterna con un presupuesto muy pequeño y es lo que se va a aumentar para que todos los usuarios del comedor social puedan tener acceso a la tarjeta solidaria. Somos conscientes de que mucha gente con la tarjeta solidaria no es suficiente, se tiene que acompañar con otro tipo de ayudas, ya que mucha gente no tiene las herramientas para cocinar o no sabe seguir una dieta saludable porque no tiene esos hábitos de cocinar. Por lo tanto, en eso es en lo que estamos trabajando para que el 1 de enero cuando haya acabado el comedor social ninguno esté en riesgo de pasar hambre en el nuestro pueblo.