La imaginación de muchos parece que se ha disparado debido al confinamiento y al estado de alarma decretado hace 17 días por el Gobierno Central. Muchos sectores se han visto obligados a cesar su actividad lo que ha llevado a muchas personas a dedicarse a colaborar con esta causa por la que médicos, enfermeros y personal sanitario se han convertido en los más expuestos ante la enfermedad del COVID-19.
El abogado paternero Sergio García, que hace poco adquirió una impresora en 3D, se ha volcado de lleno en utilizarla para fabricar pantallas protectoras que dona a centros e instituciones sanitarias de forma desinteresada. Él mismo, ha utilizado un diseño que ha ido optimizando y perfeccionado para lograr que la impresión dure menos, en un primer momento lograban imprimir 8 diademas al día y ahora consigue realizar sesenta junto con su primo David desde la ciudad de Alacuás.
De momento han logrado abastecer de pantallas protectoras a centros sanitarios y hopsitales como el de Alacuás, Xirivella, Torrente, Paterna, Villar del Arzobispo o centro de atención médica del barrio de Valterna, el 70% de la producción ha ido destinada al Arnau de Vilanova o el Hospital General. Más de 300 unidades calculan que han realizado ya en estos días en una impresora que al igual que en la industria se pone en marcha a las 8 de la mañana y no para hasta la 1 de la madrugada.
Además de ello cuentan con el apoyo de algunos seguidores en las redes sociales «nos hacen ingresos y nosotros compramos las impresoras y el materia necesarios para seguir fabricando» narran desde su cuenta de Instagram su día a día mientras han substituido su trabajo por una acción solidaria que cuando finalice pondrán a disposición de centros educativos públicos la maquinaria para que los alumnos pueda aprender a imprimir el tres dimensiones. Al mismo tiempo han puesto un número de teléfono -665721168- a disposición de todo aquel que quiera ponerse en contacto con ellos para colaborar o conocer aún más en profundidad la labor que están realizando.